¡Al buen tiempo, siempre buena cara! En Madrid se puede vivir una jornada estival de muchas maneras, pero todas pasan por una comida o una cena en algún lugar especial. En todos estos restaurantes con terraza vas a disfrutar por mucho que el mar quede más allá del horizonte. ¡Feliz verano!
Publicado en la revista esMADRIDmagazine julio/agosto de 2024
Pero, ¡qué bien le sienta el verano a Madrid! Sería imposible resumir la cantidad de planes y propuestas que la ciudad ofrece durante su temporada estival, desde que amanece y comenzamos la mañana con un café, quizás acompañado de churros, hasta que se pone el sol y suenan los acordes de los numerosos conciertos que tienen lugar en estas fechas. El mar queda lejos, sí, pero existen ejes urbanos que funcionan como verdaderos paseos marítimos, repletos de restaurantes que también ofrecen lo mejor de su carta al aire libre.
Porque qué gusto da comer o cenar rodeados de vegetación o casi tocando el cielo. Las terrazas aquí pueden estar a pie de calle, o en un jardín o patio escondido, y también en las alturas, coronando algunos de nuestros edificios más representativos que, además de arquitectura, nos brindan increíbles vistas. Así que parece que solo queda una decisión por tomar: ¿cenamos abajo o cenamos arriba? Cualquier opción es buena. Aquí van unas cuantas direcciones imprescindibles para disfrutar estos meses
Plaza de Cibeles, 1. BANCO DE ESPAÑA. Tel. 91 530 17 61
La importancia de comunicarse a través de la emoción. Los sabores, los olores, las texturas, los detalles convertidos en experiencia. Los sonidos, las vistas, el silencio… Así se siente la historia en este restaurante ubicado en uno de los edificios más representativos de nuestra ciudad, el Palacio de Cibeles. Jesús Almagro y Manu Berganza hacen verdadera magia en la cocina, con Madrid siempre de fondo. En la carta, gazpacho de tomates verdes, verduras de Aranjuez, solomillo de vaca de Guadarrama… y, de postre, helado de violeta o buñuelos de anís.
Alta gastronomía en las alturas, que para eso estamos en la sexta planta, casi rozando el cielo. Aunque aún podemos tocarlo un poco más: en la planta séptima nos espera Azotea Cibeles, un rooftop, con una amplia carta de cócteles, clásicos y modernos. ¿Qué tal un mojigato? No tiene alcohol, pero sí fruta de la pasión.
Sevilla, 3. SEVILLA. Tel. 91 330 62 10
Gastronomía y diseño se funden en un escenario único: una exclusiva azotea con unas inmejorables vistas panorámicas del centro de Madrid, situada como está en la séptima planta del hotel Four Seasons, en el Complejo Canalejas, a unos pasos de la Puerta del Sol.
Qué bien se ve todo lo que ocurre en la ciudad mientras disfrutamos de los sabores mediterráneos que siempre nos brinda la cocina del malagueño Dani García. La suya es una propuesta cosmopolita y desenfadada, con un toque de sofisticación y siempre preocupada por el cuidado del medio ambiente y la sostenibilidad.
En la carta, centrada en la excelencia del producto, encontramos platos ya icónicos en la trayectoria del reconocido chef, como el tomate nitro y gazpacho verde, el salmonete a la brasa, los ravioli de rabo de toro o el tartar de atún rojo de la costa gaditana. De postre, chocolates ahumados
Juan Ramón Jiménez, 37. CUZCO. Tel. 91 359 10 00
Dieciocho años lleva ya este restaurante siendo un auténtico símbolo de la gastronomía madrileña, sobre todo si hablamos de brasas, de parrilla. Sus orígenes hay que buscarlos en São Paulo, en Brasil, donde abrió, en los años 50, la primera de las casas Rubaiyat, con un lema de lo más innovador: “de la hacienda al plato”. Las carnes (angus, wagyu, rubia gallega) son su especialidad. Imposible resistirse a un Baby Gold o un T-bone con salsa de mostaza para dos.
La carta se ha ido abriendo con el paso del tiempo a sabores mediterráneos, así que también encontraremos delicias como el pulpo a la brasa con salsa romesco, spaghetti al Nero di Seppia, carpaccio de setas Portobello con piñones y aceite de trufa… y la ya clásica feijoada, que, aunque no se sirve en verano, hay que probarla al menos una vez en la vida. Su idílica terraza es todo un oasis urbano, puro frescor.
Arturo Soria, 207. ARTURO SORIA. Tel. 91 896 59 25
Un rincón perfecto para desconectar. Del ruido, de las prisas, y casi de todo, si no fuera porque a través de su estupenda cocina resulta muy fácil conectar con nuestras raíces. Aquí manda la tradición. A unas croquetas cremosas de jamón ibérico o una ensaladilla rusa pueden seguirle un lomo bajo de vaca con pimientos de Padrón o un rape del Cantábrico a la brasa con pilpil. A los más golosos les encantará la mousse de caramelo de violeta con chocolate blanco.
Ferraz, 2. PLAZA DE ESPAÑA. Tel. 91 368 88 82
Situada en la Casa Gallardo, junto a la Plaza de España, Dry Martini es una de las coctelerías más famosas de Madrid. Con la llegada del buen tiempo su terraza, en los jardines de Fanjul, se ha convertido en una de las más codiciadas de la ciudad, por su ubicación, envuelta en vegetación, y por su carta de cocina líquida, que firma Javier de las Muelas. ¿Lo mejor? Que se puede combinar con exquisitos platos y bocados, desde gildas hasta caviar y terrina de foie al armagnac.
Génova, 27. COLÓN. Tel. 91 108 88 81
Ha llegado el momento de revelar uno de los grandes secretos de Madrid. En el interior del restaurante La Fonda Lironda existe un patio interior que acoge una agradable y coqueta terraza, ideal para parejas. La vegetación se mezcla aquí con una decoración elegante y moderna, acorde con su carta, pensada para que los comensales se diviertan en la mesa. Hay gazpacho, salmorejo, fideuà, pollito picantón asado al horno de carbón… ¿Y de postre? Crème brûlée de coco.
Recaredo, 2. REPÚBLICA ARGENTINA / CRUZ DEL RAYO. Tel. 91 260 69 12
Bienvenidos al que es uno de los mayores referentes de la gastronomía francesa en Madrid. Su encanto provenzal se deja sentir no solo en el interior del restaurante. También, en su terraza, una de las más bonitas de la ciudad, rodeada de vegetación, con solo ocho mesas para que los comensales tengan total privacidad. Para estos meses de calor, el chef, Gustavo Valbuena, ha introducido en la carta platos más frescos y originales, muchos de ellos revisiones de clásicos del país vecino.
Es el caso de la merluza Lorraine, inspirada en la receta original de la quiche de Lorena; la raya a la meunière, un exquisito pilpil de este pez, con su gelatina y aromatizado con cítricos y alcaparras, o los callos a la normanda, con manzana osmotizada como ingrediente. Quizás haya quien prefiera probar el arroz Nantua que aquí se prepara con quisquillas en vez de con cangrejos de río.
Plaza de Celenque, 2. ÓPERA. Tel. 91 954 54 50
En un entorno apacible y acogedor que recuerda a un invernadero, enmarcado por una estructura de acero revestida con plantas trepadoras y paneles de cristal de colores, este restaurante, con terraza -The Roof-, sirve un menú informal de tapas para compartir con sabrosos ceviches y postres dulces de lúcuma. Estos platos son perfectos para degustar acompañados de deliciosos cócteles a base de pisco. Todo, bajo la dirección del chef peruano Diego Muñoz.
RESTAURANTE AMOS BY JESÚS SÁNCHEZ
Paseo de la Castellana, 22. RUBÉN DARÍO. Tel. 91 587 19 91
Alcachofas rellenas de marisco con salsa de erizo, steak tartar de vaca con caviar, gazpacho verde de aguacate con lubina ahumada y aliño de salpicón… ¡Qué difícil elección! La propuesta del cántabro Jesús Sánchez para el hotel Rosewood Villa Magna se sostiene sobre cuatro pilares fundamentales: la tradición, la esencia, el sabor y la materia prima.
Alcalá, 15. SEVILLA / SOL. Tel. 91 532 12 75
Situado en la planta más alta del Real Casino de Madrid, en pleno centro, este es uno de los grandes templos gastronómicos de la ciudad desde su inauguración en el año 1990. Su menú es un canto a la naturaleza. Cenar en su terraza es toda una experiencia. Imprescindible.
Plaza de la Lealtad, 5. BANCO DE ESPAÑA / ESTACIÓN DEL ARTE. Tel. 91 701 67 67
Abierto todo el año, si el tiempo lo permite, el bello Jardín del Mandarin Oriental Ritz se convierte en elegante espacio al aire libre para reunirse con amigos. En la imaginación del chef Quique Dacosta “es como hacer un picnic en los jardines de Versalles”.