La Puerta del Sol se convierte cada año en el epicentro de la Nochevieja para todo el país. Y es que miles de personas, venidas de todas partes, abarrotan cada 31 de diciembre (el 30 son las Preuvas) la plaza, para recibir el nuevo año y comer las uvas de la suerte al son de las doce campanadas que marcan el reloj de la Real Casa de Correos. En 2023 el aforo se amplió a 15 000 personas tras la remodelación de la plaza.
Existen varias teorías sobre el origen de la tradición de comer doce uvas. Pero la más arraigada entre los españoles es la que sitúa el inicio de esta costumbre en 1909. Los viticultores levantinos tuvieron tal excedente de esta fruta que decidieron repartirla gratuitamente entre los ciudadanos, aludiendo que les traería fortuna comerlas en Nochevieja.
El éxito de esta curiosa campaña queda claro un siglo después, ya que en toda España se comen doce uvas que simbolizan la suerte para los doce meses del año, al son del reloj de la Puerta del Sol.
Su movimiento y sonido para marcar las 12 de la noche del 31 de diciembre es toda una liturgia televisada. Cuando faltan segundos para la medianoche la bola, situada en la parte superior de la torre, baja acompañada de sonido de carillón. Poco después suenan los cuatro cuartos, que anticipan las doce campanadas, separadas entre sí de un intervalo prudencial para evitar posibles atragantamientos con las uvas.
Pero este no es sino el comienzo de una noche en la que Madrid no duerme. Ambiente agradable, buena música y ganas de festejar son ingredientes que hacen de la noche del 31 de diciembre madrileña una cita imprescindible.
Acceso y aforo de la Puerta del Sol con motivo de las campanadas de fin de año 2023
Con objeto de garantizar la seguridad de la ciudadanía durante las tradicionales campanadas de fin de año, las autoridades fijaron en 15 000 personas el aforo en la Puerta del Sol (el desalojo de la plaza comenzó a las 21:00 h) para dar la bienvenida al Año Nuevo con las uvas el 31 de diciembre y la víspera, el día 30, con las 'preuvas'.
Los dos días la Policía Municipal y la Nacional realizaron filtros de control en la Plaza Canalejas (Carrera de San Jerónimo), en la calle Alcalá a la altura de Aduana, y en Mayor con calle Ciudad Rodrigo, y en la calle Arenal en la Travesía de San Ginés
El conteo lo hizo Protección Civil en los cuatro puntos de acceso a la Puerta del Sol (en los filtros de las calles Mayor, Arenal, Alcalá y Carrera de San Jerónimo). La Policía Municipal, asimismo, evitó el 30 y el 31 la venta ambulante en la Puerta del Sol y aledaños, así como la presencia de objetos peligrosos.
Como en días anteriores de máxima afluencia, durante los días 30 y 31 de diciembre no se permitió el acceso ni la salida de usuarios por la estación de Sol a partir de las 18.00 horas , pero sí la circulación por el interior de la misma, donde no se suspendió el tráfico de trenes ni la conexiones.